A menudo, cuando adquirimos un coche nuevo o de segunda mano nos fijamos en el tipo de faro que tiene pero, realmente cuantos tipos de iluminación hay en el mercado y sobre todo cuáles son las ventajas e inconvenientes según el tipo de alumbrado? Como punto de partida mencionar que la gran mayoría de consumidores cree que las últimas novedades que salen al mercado son las mejores, aunque puede ser que no se ajuste a lo que más necesitamos. En esta nueva publicación vamos a estudiar los pros y contras de los diferentes sistemas de iluminación.
Faros halógenos
Son los faros más presentes en la actualidad debido al bajo coste de sustitución y la sencillez de composición. Generalmente tienen una duración de unas 1.000 horas de funcionamiento. Está compuesto por una parábola que proyecta la luz emitida hacia la carretera. También hay modelos que incluyen un sistema direccional con ángulo de giro para alumbrar mejor en las curvas. Realmente su manejo y repuesto es relativamente fácil siempre y cuando no se toque el vidrio con las manos sucias ya que puede provocar que el cuarzo se caliente de forma desigual. El gran problema de este sistema de iluminación tiene que ver con el rendimiento. La principal desventaja es que la mayor parte de la energía que consume se pierde en forma de calor. Existen de dos tipos:
- Formado por un material cuyas paredes internas refractan la luz provocando una iluminación más potente.
- El segundo es tipo proyector, el cúal está formado por un cilindro con cristal curvo el cuál tiene por objetivo proyectar la luz para no desaprovecharla.
Faros led
Es uno de los más modernos faros que existen en la actualidad debido a su alta calidad a pesar de que la haz de luz no sea tan potente como la de Xénon. Una de las características principales es que están compuestas por muchos puntos de luz y por lo tanto no se necesita reflector. Se trata de un sistema de iluminación entre halógeno y Xénon que describiremos más a delante. La principal ventaja radica en que el reducido tamaño del led ha posibilitado crear nuevos sistemas de iluminación desconocidos hasta la fecha. Como punto de desventaja hay que mencionar que a pesar de que las bombillas apenas generan calor, emiten altas temperaturas desde la base, lo cual provoca que su instalación sea ardua y por medio de disipadores de calor o ventiladores. El problema es que estas piezas quedan cerca del motor, uno de los puntos más calientes del coche. Todas estas circunstancias hacen que su instalación no sea barata.
Faros Xénon
Apareció por primera vez hace más de 20 años y para muchas marcas supone una prioridad en la fabricación de sus coches. Como principal ventaja destaca la potencia del haz frente al faro halógeno siendo prácticamente el doble, además que su color es mucho más blanco y apreciado por un gran número de conductores ya que provoca un menor cansancio visual. Los faros Xénon aportan una luz más blanca que los halógenos mayor intensidad, por lo que deben llevar un sistema de auto nivelación de la altura del haz y lavafaros. Como principal desventaja añadir el alto coste de adquisición debido al complejo sistema de montaje. Por esa razón en el caso de necesidad de sustitución la mejor opción es adquiriendo un faro de segunda mano. Este tipo de sistema de iluminación solamente podrá ser manipulado por personal autorizado.
Faros Láser
Aunque es un sistema que a estas alturas apenas podemos encontrar en el mercado, marcas como Audi y BMW están invirtiendo recursos para que dentro de poco sea una realidad. Esta tecnología aún tiene que evolucionar pero la iluminación LED láser consigue iluminar el doble que la LED que conocemos. Además consigue rebajar el coste energético un 30%. Los diodos láser don 10 veces más pequeños que los convencionales.
Resumen de los distintos tipos de faro
A continuación os ponemos una tabla resumen para que visualices mejor las ventajas e inconvenientes de cada tipo de sistema de iluminación: