Los amortiguadores son el elemento principal de la suspensión de un vehículo, y su papel es crucial tanto en la seguridad como en el confort de la conducción. Por eso es importante saber cuándo debemos cambiar el amortiguador de un coche, para evitar problemas a la hora de conducir.
La función principal del amortiguador es absorber y controlar las vibraciones y movimientos del vehículo, para que el coche se mantenga estable y la conducción sea suave y segura. Sin embargo, con el tiempo, los amortiguadores se van desgastando hasta que llega el momento de reemplazarlos.
Señales de advertencia de amortiguadores desgastados:
Balanceo excesivo: Uno de los signos más evidentes de amortiguadores desgastados es un vaivén notable del vehículo al girar o cambiar de carril. Si sientes que el auto se inclina demasiado, especialmente en las curvas, es una señal de que los amortiguadores pueden estar desgastados.
Botes o rebotes excesivos: Cuando pasas sobre baches o irregularidades en la carretera y notas que el vehículo rebota más de lo normal o se siente inestable, es hora de verificar los amortiguadores. Los amortiguadores en buen estado deben mantener el contacto de las ruedas con la carretera de manera constante.
Distancia de frenado prolongada: Los amortiguadores ayudan a mantener las ruedas en contacto con la carretera durante la frenada, por lo que si sientes que la distancia de frenado de tu vehículo se ha alargado considerablemente, esto puede ser una señal de que los amortiguadores no están haciendo su trabajo correctamente.
Desgaste irregular de neumáticos: Si tus neumáticos muestran un desgaste desigual, especialmente en los bordes, los amortiguadores pueden ser los culpables. Los neumáticos desgastados de esta manera pueden reducir la tracción y la capacidad de frenado.
Sacudidas excesivas: Si sientes que el vehículo sacude o vibra demasiado al atravesar superficies irregulares, esto puede ser un indicio de problemas en los amortiguadores.
Consejos para mantener tus amortiguadores en buen estado:
Mantenimiento regular: Realiza un mantenimiento preventivo periódico de tu vehículo, incluida la inspección de los amortiguadores. Un mecánico experimentado puede evaluar su estado y determinar si necesitan ser reemplazados.
Conducir con cuidado: Evita pasar por baches y obstáculos a altas velocidades y con un impacto fuerte. Esto prolongará la vida útil de tus amortiguadores.
Carga adecuada: No sobrecargues tu vehículo, ya que esto puede ejercer presión adicional sobre los amortiguadores y provocar un desgaste prematuro.
Sigue el programa de reemplazo recomendado: Consulta el manual del propietario de tu vehículo o busca la recomendación del fabricante sobre cuándo debes reemplazar los amortiguadores. Por lo general, se recomienda hacerlo cada 60,000 a 90,000 kilómetros, pero esto puede variar según el vehículo y las condiciones de conducción. En cualquier caso, es conveniente revisarlos cada 20,000 kilómetros.
Si llega el momento de cambiar los amortiguadores, es importante cambiar siempre al menos los amortiguadores del mismo eje juntos, para que trabajen de forma similar. Recuerda que en Delfincar tenemos amortiguadores de numerosos modelos de coches, si necesitas cambiar el amortiguador del tuyo.